Reflexión 16. Jesús Quintero.
Reflexión 16:
MIEDO A LA MUERTE
Conocí un hombre que se pasó la vida temiéndole a la muerte, y cuando al fin llegó su hora la aceptó con una entereza y una valentía admirables.
Nunca se sabe como va a reaccionar uno ante la desgracia, así que es una absurda pérdida de vida y de energía asustarse por lo que ha de venir. Lo que haya de ser será, y a lo mejor no es tan terrible como lo imaginamos.
El hombre se acostumbra a todo. No es la ruina ni el fracaso, ni el SIDA, ni la enfermedad lo que nos desmorona. Cuando las cosas llegan se encajan con más o menos dignidad o filosofía. Lo terrible y lo absurdo es este miedo de la espera, este sinvivir de vivir continuamente asustados, esperando que en cualquier momento suceda lo peor, y a lo mejor ni sucede, ¿no te parece?
Cuando tengas ganas de morirte, esconde la cabeza debajo de la almohada y cuenta cuatro mil borregos.
Quédate dos días sin comer y verás qué hermosa es la vida.
Pan, carne, pataje, pringá, bacalao...
Tenemos la ensaladilla.
Tenemos el menudo.
Tenemos los camarones.
Tenemos los boquerones.
Tenemos carne con papa.
Tenemos cóctel de mariscos, y si te encuentras uno te invito un mes a Matalascañas.
O quédate sin mujer, verás...
Jesús Quintero

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