Gatos y brujas.
Leyendas y supersticiones que giran alrededor de los gatos.
Estos maravillosos felinos poseen una personalidad muy característica. Y es precisamente por esa aura de misterio que les rodea, por su carácter intrigante y por muchas dosis de cultura popular, que a lo largo de los siglos se les ha asociado como mascotas de las brujas, portadores de mala suerte e incluso se ha llegado a creer que los gatos negros eran la manifestación del diablo.
Sigue leyendo y descubre todas las historias y supersticiones relacionadas con gatos y brujas para entender mejor su curioso origen.
Los gatos en la mitología
Freyja es una de las diosas más misteriosas de la mitología nórdica. Se le considera la diosa de la muerte y el más allá y se le relacionaba con la brujería y la magia negra. La representación gráfica más habitual de esta diosa la muestra subida a un carro tirado por gatos mágicos.
También encontramos referencias en la mitología griega. En ella, la diosa Diana era símbolo de fertilidad y se representaba como un gato negro, sin embargo, más tarde esta misma diosa pasó a ser símbolo de brujería.
Los gatos y sus atribuciones mágicas estaban también presentes en la mitología celta. Los celtas los consideraban guardianes de otro mundo y asociaban su presencia «con que el diablo estaba cerca».
Gatos y brujería en la edad media
Durante la edad media encontramos numerosos episodios de caza de brujas, siendo uno de los más conocidos el de las brujas de Salem en Massachusets. Durante todos estos siglos solía coincidir que las mujeres acusadas de practicar brujería siempre tenían un gato cerca.
Varios documentos señalan que se creía también que los gatos cumplían las órdenes de la bruja e incluso que los gatos eran en realidad brujas disfrazadas.
Por qué gatos negros
En algún momento, el emparejamiento de brujas con gatos se redujo a gatos negros, aunque Fallingstar dice que no está del todo claro por qué sucedió eso. «La relación entre las brujas y los gatos negros en particular es probablemente imaginaria, pero es posible que los gatos negros sean mejores cazadores de ratones, ya que no se los puede ver de noche y, por lo tanto, tienen una ventaja de caza», explica. Las brujas tienden hacia lo práctico.
Pero la idea de que los gatos negros dan mala suerte no es universal. De hecho, algunas culturas creen que los gatos negros traen buena suerte. Por su parecido con la diosa-gato Bastet estos fueron honrados en el antiguo Egipto y en otros países, como Escocia y Japón, se cree que representan la prosperidad.
Gatos y brujas en la actualidad
Si piensas en alguna película o serie que tenga como protagonista a una bruja, probablemente encuentres rápidamente en la ficción a su compañero felino.
Todos estos siglos de leyendas, creencias y supersticiones han dejado huella en la cultura popular y gatos y brujas son un dúo inseparable en diversas manifestaciones de este personaje.
Vía: montegatto
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