Un par de mujeres estaban jugando golf una mañana soleada de domingo.



Un par de mujeres estaban jugando golf una mañana soleada de domingo. Cuando la primera de las dos salió, vio con horror como la pelota se dirigía directamente hacia unos hombres que estaban jugando en el siguiente hoyo. De hecho la pelota golpeo uno de los hombres quien de inmediato juntó ambas manos en su entrepierna y se cayó al suelo y procedió a rodar agonizante.

La mujer corrió hasta donde estaba el hombre e inmediatamente comenzó a pedir disculpas.

Entonces la mujer le explicó que irá quiropráctica y le ofreció ayudarle a eliminar el dolor.

"Por favor, déjeme ayudarlo. Soy quiropráctica y sé como quitarle el dolor si usted me lo permite", le dijo al hombre muy preocupada.

"Ouch, auuuu, noooo. Estaré bien... El dolor se me pasará en unos minutos..." le contestó el hombre mientras permanecía en posición fetal tirado en el césped y con sus manos en su entrepierna.

Entonces ella insistió y finalmente el le permitió ayudarlo y ella gentilmente le separó las manos y lo acostó a un lado de ella. Le desabrocho los pantalones y puso su mano adentro, comenzando a masajear.

"¿Se siente bien?", le preguntó la dama.

"Me siente fantástico!", le contestó el hombre, "pero mi dedo me sigue doliendo como un demonio...". 

Web

Comentarios