Todos estamos agrietados


 Quizás es mas como dijiste antes, que todos estamos agrietados. Cada uno de nosotros empieza siendo un recipiente hermético. Y pasan cosas. Personas que nos dejan, o que no nos quieren, o que no nos entienden, o a los que no entendemos, y nos perdemos, nos fallamos y nos hacemos daño. Y el recipiente empieza a agrietarse por algunos sitios. Y, si, en cuanto el recipiente se agrieta, el final es inevitable. En cuanto empieza a entrar la lluvia dentro de Osprey, ya nunca será remodelado. Pero esta todo ese tiempo desde que las grietas empiezan a abrirse hasta que por fin nos desmoronamos. Y solo en ese tiempo podemos vernos unos a otros, porque vemos lo que hay afuera a través de nuestras grietas, y lo que hay adentro se nos ve también a través de ellas. ¿Cuándo nos vimos tu y yo cara a cara? No hasta que me viste entre mis grietas, y yo a ti entre las tuyas. Hasta ese momento solo veíamos ideas del otro, como mirar tu persiana, pero sin ver lo que hay adentro. Pero cuando el recipiente se rompe, la luz puede entrar. Y puede salir.

John Green

Paper Towns

Web

Comentarios