Hablar por no hablar

 

Hablar por no hablar Dicen que en Venezuela hay dictadura... quizá; lo que es seguro es que hay es petróleo. Cuentan que en Palestina existe un conflicto religioso... puede... Lo que sí hay es una ocupación violenta.

Luego los hay que llaman refugiados a los que sólo hallan morada en el fondo del Mediterráneo, los que denominan accidente de trabajo a lo que es resultado de la precariedad o el terrorismo laboral... Algunos denominan "ocio" a la prostitución... Otros adjetivan como "hechos alternativos" a lo que desde siempre se ha conocido como mentira... A veces se califica de arte a torturar a un animal hasta la muerte, una vez oí a un tipo que entendía como tradición a lo que no era más que la inercia primitiva de épocas salvajes.

Conozco a un personaje que considera piropo lo que es un insulto intimidante, que llama fe al hecho de negar la razón y que confunde la justicia con la venganza. Hay personas que nombran a grupos legales de chantajistas y extorsionadores como "loobies".

Existen seres civilizados que consideran "defensa" a los movimientos agresivos de sus ejércitos... Hay elementos que describen como "olas de calor" a los estertores del clima...

Incluso hay quienes invocan el artículo 155 de la constitución española para no tener que reconocer el fracaso del artículo 14 de la misma.

¿Hablar mucho para no decir nada? Prefiero leer lo suficiente como para saber un poco sobre algunas cosas.

Matías Argumánez ©® publicado en La Besana