Un beso para aquellos que nos acompañan desde arriba.

 Ojalá las sillas vacías esta noche siempre estén llenas. Siempre nos recuerden a alguien y nos hagan sonreír. Porque aunque se vayan, siguen aquí. Ojalá nos hagan seguir celebrando la llegada del Año Nuevo como ellos nos enseñaron a hacerlo. Y nos llenemos de fuerza para vivirla como podamos. Ojalá los de allí arriba brillen hoy más que nunca, y reciban todos los besos que tenemos para mandarles. Que son muchos. Y escuchen cada uno de los brindis que hagamos. Por ellos, por nosotros, y por todo lo vivido. Ojalá recuerden cuánto les echamos de menos, y esta noche, más.

Un beso enorme al cielo para todos aquellos que hoy nos acompañan desde allí arriba.