El gallo y la perla. Fábula.

 



Cierto día, el gallo más comilón del gallinero se paseaba por la granja buscando algo que llevarse al pico.


No tenía suerte, porque lo pollitos habían acabado ya con los granos de maíz.


Entonces, casi enterrada en la tierra, encontró una hermosa y valiosísima perla. El gallo, sin embargo, se apenó:


- ¡Qué lastima haberte encontrado! Ni yo puedo ser de provecho para ti, ni tú me sirves de nada.


Moraleja: El valor de las cosas depende de las necesidades de cada uno.

Esopo


Comentarios