En la vida real.

“(…) En la vida real, si quieres que las cosas salgan bien, si quieres resistir, debes pactar continuamente con tu emotividad: ante tal cosa no puedo reaccionar de forma exagerada, tal otra tengo que aceptarla, respecto a tal otra debo hacer la vista gorda. Uno adapta sus sentimientos al entorno sin descanso, es indulgente con quienes ama, asume cientos de pequeños roles cotidianos, hace equilibrios, compensa, sopesa para no poner en peligro toda la estructura, pues uno mismo forma parte de ella.Contigo, querido Leo, no tengo miedo de ser tan espontánea como lo soy en lo más íntimo de mi alma. No pienso qué puedo exigirte y qué no. Simplemente, escribo a tontas y a locas. ¡Y me hace tanto bien! Todo esto es mérito tuyo, querido Leo, por eso te has vuelto tan imprescindible para mí: me aceptas tal como soy. (…)”

(”Contra el viento del norte”, de Daniel Glattauer)





Comentarios