Espero que aparezca alguien que tenga el valor de amar cada centímetro de ti…

“Donde quiera que estés, espero que aparezca alguien que tenga el valor de amar cada centímetro de ti, que además de quitarte la ropa, también te desnude de tus miedos, de tus inseguridades, de las tristezas y te haga el amor a sonrisas.

Que siempre te diga lo mucho que le encantas, adviértele que en esa espalda tuya uno puede perderse, pero que no le tema a la aventura, que encuentre en el olor de tu cabello el otoño necesario para quedarse y verte al despertar de tu lado de la cama sea su paisaje favorito.

Espero que haga sentir que estás en su vida, que en sus planes aparezcan serenatas de madrugada, días de campo, noches perdidos en medio de la sierra, largos trayectos de carretera escuchándote cantar, fines de semana en los pueblitos y museos, porque amas los museos.

Ojalá que te pregunte cada domingo por tus cicatrices, que quiera escuchar tus historias un millón de veces, le cuentes de aquella vez que te caíste en la bici, de cuando aprendiste a cocinar, de tus viajes al centro del país, de los gatos que has tenido y de lo mucho que te gusta el mar.

Deseo que jamás se cure la adición tan linda que sí tus besos, que se enferme de tus caricias y no pueda vivir sin ellas, que observar tus ojos sea su pasatiempo favorito, que te extrañe como un loco los días que no te vea y que lo lleves fuera de este planeta al sentir que en tu corazón se va escribiendo su nombre.

Espero te proponga un buen vino y un buen baile, que siempre llegue a tiempo a tus risas, a tus éxitos, a tus fracasos y a tus malos momentos, que te cosa los sueños cuando se te rompan, tome tu mano cuando te falten alegrías y te haga sentir que estás en el lugar correcto, como yo un día lo hice.

Te deseo.

Autor: Emmanuel Zavala