Tus medidas no definen la belleza.

Tus medidas no definen la belleza de tu carisma, ni tu silueta reúne toda la hermosura de tu personalidad. De hecho, lo que ves en el espejo no es tu reflejo, es la versión que tienes de tí misma, así que trata de apreciar todo lo que compone tu cuerpo, de cuidar todo lo que te forma y de defenderlo hasta de tus propias ofensas que se originan por tus inseguridades. 

Aprende a admirarte, disfruta de lo que ves cuando te miras, háblate con respeto y descubre la perfección que hay en tus características particulares. Míralas una y otra vez hasta que te gusten, enamórate tanto de tí, que no te queden dudas de lo linda que eres, que te lo creas y lo asumas. 

Deja de compararte con otras, de lastimar tu autoestima con criterios sin fundamento, deja de compadecerte porque tu cabello, tu piel o tu silueta no es lo que quisieras que fuera. No seas injusta contigo, pídete perdón por todas las veces que magnificaste tanto tus defectos, que disminuiste por completo tus virtudes. 

No permitas que la opinión ajena te limite, usa la ropa que te gusta, porque lo que importará es lo que te haga sentir cuando te veas con ella. Repite todo aquello que te haga sentir bonita, date la oportunidad de sentirlo, no te castigues más quejándote por haber roto la dieta, si lo hiciste porque el placer de saborear tu postre favorito te sedujo. 

Transforma la manera en que te muestras al mundo, hazlo con firmeza y seguridad, luce la imagen que se te dio al nacer, valora cada lunar,   cada marca con la que llegaste, piensa en ellas como un marcador rojo con el que Dios te subrayó para resaltar por donde fueras, piensa en que tal vez así lo hizo porque no quería que te sintieras invisible o que fueras demasiado común entre millones de personas.

 Piensa que cada una de esas características que te hacen diferente al resto, es una oportunidad de sobresalir sin tener siquiera que esforzarte por ello. Cuando lo hagas, seguramente te sentirás agradecida por cada una de ellas, porque descubrirás que están en tí precisamente para que nadie pudiera olvidarte.

Deja de avergonzarte por ser quien eres y empieza a agradecer por el maravilloso regalo que es ser diferente. Ama lo que te hace única y no temas a lucirlo con orgullo y valentía. No sabes lo hermosa que se ve una mujer cuando es consiente de su valor y lo grande que se vuelve su poder cuando descubre que es una joya increíblemente preciosa. Deja que tu luz sea tan radiante como tu y nunca dejes de brillar. 👑

Autor: Eli Bt Fa