O estás con las oprimidas o con el opresor, no hay equidistancia posible, no te engañes.
En 2018, un grupo de hombres británicos que celebraban una despedida de soltero en Benidorm, compraron con 100 euros el consentimiento de un mendigo para tatuarle el nombre del novio en la frente. Al año siguiente, en Gran Canaria, otros sinvergüenzas pagaron 5 euros a un indigente para que se dejase pegar una bofetada mientras lo grababan en vídeo. En ambos casos la sociedad se escandalizó con la crueldad que supone aprovecharse de la extrema necesidad de esos hombres. Sin embargo, cuando esa misma pobreza lleva a las mujeres a consentir las relaciones sexuales y la violencia que los puteros demandan, la hipócrita sociedad responde «que las mujeres hagan lo que quieran con su cuerpo». «Feminismo pro-derechos» lo llaman (y no se ponen ni coloraos…)Si la misoginia te impide empatizar con la víctima de una injusticia sólo porque es una mujer, eres un/a machista. Y ojo porque, si escondes tu machismo tras el eufemismo "feminismoS", se hará crónico. No existen los "feminismoS". Feministas hay muchas y muy diversas pero feminismo hay uno; y es abolicionista del género, el porno, los vientres de alquiler y la prostitución. O estás con las oprimidas o con el opresor, no hay equidistancia posible, no te engañes
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