¿A qué se debe?

 

Ambos frutos nacieron del mismo árbol, ambos cuelgan de la misma rama y ambos se nutren de la misma tierra. No obstante, uno está maduro y el otro no.

¿A qué se debe?

La naturaleza tiene un tiempo para todo, incluyéndonos a nosotros los humanos. Al igual que tú, que quizás ves como otros prosperan, crecen y llevan vidas que tú también quisieras llevar, ellos, también forman parte de esa maquinaria universal que avanza a su propio ritmo.

Así que no tienes nada de que preocuparte, ni mucho menos porque competir. 

Fluye...

Tu tiempo llegará, solo tienes que ser paciente y aferrarte a tus metas.