Ella bailaba siempre
como si nadie la estuviera viendo
En cambio el se quedaba mirando en un rincón,
como si todos esperaran que cometiera un error.
Y bueno
Ella se enamoró de su timidez
El se enamoró de su confianza.
Y si, eran polos opuestos…
Pero nos complementábamos tan bien…
Comentarios
Publicar un comentario